Pues me esperaba otra cosa, francamente. Entre esparraguera y esparraguera, pensábamos comprobar el tamaño de esas ruinas que se veían en las fotos de satélite de Google Earth, justo donde el PGOU indica que están los restos del monasterio de Santa María de Cuteclara, a 37º 54' 07'' N y 4º 50' 33'' O. Todos los que lo busquen verán que hay una desviación de unos 250 m en la foto de satélite, que se repite para todos los sitios arqueológicos de la zona, como por ejemplo el pozo de la nieve.
Básicamente, lo que hay en lo alto de un pequeño cerro son las ruinas de una estructura que parece un edificio con dos naves paralelas, de unos 11 metros de largo, y 4,5 metros de ancho cada una. Se conserva un alzado de poco más de medio metro, como máximo, y en algunas partes toda la estructura está cubierta por tierra y matorral. El material es piedra y ladrillo, y como no soy arqueólogo diré que he visto lo mismo en Cercadilla y en algunos muros de casas medio caídas de Santa Marina, con lo cual no me dice nada. Algunas de las paredes están encaladas. Hay restos de material por las laderas del cerro, incluyendo algunas tejas. Aquí van algunas fotos:
Para ver el tema con perspectiva, pongo también la comparación de la zona entre 1957 y 2007, donde se puede ver como a mediados del siglo pasado había dos caminos que subían a la pequeña edificación, aunque no se llega a ver si está en mejor estado que hoy.
Y por último, un pequeño mapa de cómo llegar al sitio en cuestión.
A mí me quedó una sensación un poco extraña. La verdad es que por un lado me hace ilusión pensar que efectivamente son las ruinas del monasterio, pero no acabo de verlo... Es demsiado pequeño, podría servir como la iglesia del monasterio, pero tiene que haber algo más. Con esto sólo no vamos a ningún lado, y veo más posible que sea cualquier tipo de construcción agrícola más moderna. Si alguien conoce algún dato más que refuerce lo que que dice el Ayuntamiento en su PGOU, estaría bien que lo compartiera. Mientras tanto, habrá que creerse que allí, conocida sólo por los esparragueros, se esconde la memoria de Cuteclara.
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Si bajáis a los comentarios, queda bastante claro que estos restos marcados por el Ayuntamiento no tienen, probablemente, nada que ver con el monasterio mozárabe en cuestión.
Hola Puerta, como nadie dice nada te voy a comentar un poquillo.
ResponderEliminarEl aparejo que presentan esos muros en efecto es como el de Cercadilla, es decir, mixto, a base de ladrillo y mampuesto, pero la diferencia está en 500 o 900 años. Esto es el típico aparejo mixto típico del XIX y primera mitad del XX. Dirás ¿y como ves la diferencia?, pues es difícil de explicar, son matices como el tipo de ladrillo o el mampuesto, y sobretodo la forma de combinarlo. Un aparejo de este tipo contemporáneo está integrado en una tienda de ropa "surfera-poligonera del taco" de la calle nueva, han dejado el muro visto del bloque y se puede ver desde la calle. Si le echas una ojeada verás de lo que hablo, siempre son dos o tres hiladas de ladrillo que separan las fajas de mampuesto que suelen medir unos 60 cm. de alto.
¿Y por qué la Gerencia tiene catalogado esto como Cuteclara? pues yo sospecho que porque han catalogado de leidas (también creo que se basan en el articulo de Castejón y Hernández sobre los monasterios mozárabes), como es el caso del yacimiento de Kant-His o los Torreones, al lado del puente Mocho, que aparece catalogado por duplicado con dos coordenadas distintas, porque a todas luces se han basado en el libro de Bernier que tiene ese error y no han ido a comprobarlo in situ
Saqunda ¿tú tienes idea de lo que le pregunté a Puerta en la entrada sobre la Puerta del Colodro?
ResponderEliminarLamalgama, de verdad que no es que te haga el feo, es que no tengo ni puñetera idea. He estado liado con un libro sobre urbanismo de la zona de Gran Capitán buscando sobre el tema y no dice nada... Un consejo: la Biblioteca Virtual de Prensa Histórica. Mira cuándo fue la visita y empápate de los periódicos del momento. Es tedioso y tal, pero... quien algo quiere...
ResponderEliminarY Saqunda, gracias por la aportación. Más o menos me esperaba una respuesta de ese estilo, me parece de una gran cutrez nombrar los monumentos con esa ligereza. Cuando tenga un rato modifico un poco la entrada para poner los matices estos.
Lamalgama, la visita de Alfonso XII fue captada por José Spreafico como fotógrafo de la Casa Real, lo que le permitió acompañar al rey en su visita por Andalucía. Así que lo mismo hay alguna foto de él que aparezca. También hay un libro "Impresiones de un viaje a Andalucía con SM el rey Alfonso XII" de Inocencio Esperanzas. (Estos datos los he sacado de "La Mezquita de plata" de A. J. González Pérez, libro que recomiendo si te gusta la fotografía antigua de Córdoba).
ResponderEliminarPor otra parte buscando en el google "visita Alfonso XII Córdoba) me ha salido esto: http://prensahistorica.mcu.es/es/catalogo_imagenes/imagen.cmd?path=504050544&posicion=1
Puerta, de nada. Y no se me ha olvidado lo que me pediste...
Yo no digo nada, pero me lo leo todo, q conste
ResponderEliminarsaludos niñ@s! >:o]
Cuando me he cruzado cadialmente con este tema sobre ruinas históricas de Cuteclara, no he podido más que sonreír.
ResponderEliminarEsas supuestas ruinas a las que se refiere son de una vivienda de pastor que tenían unos corrales y cochiqueras anexos y de construcción no más lejana que mitad del siglo XIX. Era la vivienda del pastor de la finca Casilla del Aire que cuidaba el rebaño de ovejas y unas piaras de cerdos, los cuales guardaba en unos apriscos y cercas que estaban en la ladera que desciende al sur de lo que era la pequeña casa. Para más señas, el último pastor que vivió allí en la década de 1950 y hasta mediados de la de 1960 se llamaba Juan Vioque. Un hombre singular y recio que tenia bastantes hijos que se criaron allí, uno de ellos llamado Juan que ahora tendrá alrededor de 67 años fue compañero de juegos de los niños que por allí andábamos, que estudiaron y en general prosperaron, alguno seguramente vivirá en Córdoba. La mujer de Juan Vioque creo que se llamaba Manuela, casados en segundas y aportando cada uno hijos a la pareja, pero no estoy seguro de estos últimos datos,
Aquella casa no tenia agua corriente, pero tenia un sistema curioso. Había un pequeño pozo en el arroyo que está al este abajo del cerro a unos 200 meros (creo que llamado La Confiesa que confluye más abajo con Cantarranas) y Vioque había enseñado a un borriquilla a subir y bajar sola cagrada con cántaras, por un camimito en zig-zag para sotear la elevada pendiente. Así que un miembro de la familia se ponía abajo en el pozo y otro arriba en la casa hasta llenar el depósito de agua para el suministro diario.
Cuando se jubiló Vioque la familia se trasladó a Córdobaa un piso que tenia, el pastoreo desapareció y esa casa del cerro, conocida como la cada de Vuoque, quedó cerrada y, al ser de obra muy simple, en pocos años arruinada y desaparecida.
Como son hechos vividos, son hechos ciertos que se pueden testificar aún.
Siento tirar por tierra las ilusiones de tanto buscador de tesoros históricos, cuando el tesoro es la vida misma que impregna la historia de cada ser humano que ha vivido en cualquier momento, como la de esa familia de Juan Vioque.
Hoy esa escena que relato seria imposible. El agua de ese pozo en el arroyo estaría profundamente contaminada por los pozos sépticos de las construcciones incontroladas e ilegales de cotas superiores. Pero, además, el pozo no existe porquesta los cientos de pozos ilegales aguas arriba rompieron el manto freático. El paraje convertido en autovía de domingueros, perolistas, deportistas, cazadores, ecologistas, excursionistas, motoristas, caballistas,campistas, naturistas y soñadores de tesoros es hoy un cadí estercolero irreversible que no podría albergar una historia como la descrita. Creo que el bueno de Vioque no llegó a ver como ese paraje se consumía pasto del fuego cada verano una y otra vez como producto de la presión de esa horda de urbanistas a partir de los alos 60's. Todo producto de la más irracional de las políticas urbanísticas, que en vez de urbanizar la falda de la sierra de Córdoba para hacer un espacio ciudadano redidencial único aprovechando la bella orografía que la distinge, prefiere hacer un espacio vació e inmanejable, lleno de protecciones, para terminar en un importante deterioro ambiental.